Hace menos de un mes, la rampa del puerto pesquero fue objeto de la creación de un mural en honor de los remeros de Santurtzi, una iniciativa social largamente gestada, y que partió de una petición popular. En el mismo entorno, se ha procedido esta semana a la reposición de las losas de cerámica que alrededor de la grúa recuerdan a los Niños de la Guerra que partieron a diferentes países huyendo de los horrores de la Guerra Civil.
“Dentro del proceso de recuperación de memoria histórica que estamos llevando a cabo en los últimos años en el pueblo, esta actuación pretende renovar y mantener vivo el recuerdo a la gran cantidad de niños y niñas que, a partir de abril de 1937, tuvieron que partir del puerto de Santurtzi hacia otros países como consecuencia de la Guerra Civil”, ha señalado el alcalde del municipio, Ricardo Ituarte.
De hecho, el puerto de la localidad marinera fue testigo de cómo muchas familias tuvieron que separarse para enviar a sus hijos a destinos como Francia, Reino Unido, Rusia y Bélgica.
La cerámica, que fue inaugurada en el año 2006 con motivo del sesenta aniversario de aquellos acontecimientos, se colocó en ese lugar por iniciativa de la Asociación de los supervivientes de aquellos viajes que se iniciaron en Santurtzi en el buque Habana. Por diversas circunstancias, la cerámica se encontraba deteriorada y en honor a las familias que vivieron tan dramática situación, se ha renovado totalmente por el mismo artista que la confeccionó hace ahora casi diez años.
La zona se ha protegido con una valla perimetral y se ha rehecho aplicando nuevas técnicas que pretenden asegurar su mayor duración. “De alguna manera, se trata de un pequeño reconocimiento a aquellas personas, recuperando de alguna manera nuestra memoria histórica y recordando que muchos de los antepasados de nuestros vecinos y vecinas tuvieron que dejar un día su pueblo, nuestro pueblo, y no volvieron a regresar”, ha recordado el concejal de Cultura y Euskera, Danel Bringas.
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